No sé cómo esta película llegó a mi carpeta de películas, pero lo cierto es que allí estaba y que hace un par de noches llamó mi atención y decidí verla. A los pocos minutos me di cuenta de porqué me había hecho con ella, y es que hace muchos años, cuando yo estaba en la ESO, qué tiempos aquellos, nuestra profe de inglés nos mandó leer el libro "The Body", libro que me dejó muy buen sabor de boca y que siempre había tenido en la cabeza. En algún momento de mi vida que no recuerdo, y eso que yo no me drojo, debí averiguar que esta película se basaba en aquella novela, y supongo que esa sería la razón por la que Cuenta conmigo, o Stand by me para los lectores internacionales, apareció en mi ordenador (mágicamente, que yo no pirateo...)
A los pocos minutos de la película ya empecé a notar esa horrbile sensación que yo detesto porque me impide ser feliz que es la de "de qué me suena este actor..." Y es que... ¡¡cómo no me iban a sonar!! ¡¡Si son todos actores megamíticos!! No era capaz de resolver mis dudas por mí misma y tuve que recurrir a imdb, y entonces ya dije: ¡¡¡señor qué elenco!!! No creo que haya otra película en la historia del cine que recoja tanto actor memorable como esta cinta.
Para empezar, la película está protagonizada por un niño monísimo que yo no le sacaba ningún parecido, vamos, que yo no sabía quién era ni me sonaba de nada hasta que vi su nombre en imdb. Ni más ni menos que Wil Wheaton. Quizás muchos sigáis en la misma postura, pero yo me retorcí en mi asiento y apreté mi ojete cuando me vi al archienemigo de mi queridísimo Sheldon Cooper protagonizando esta película. El querido amigo de nuestro protagonista también tenía telita, y es que estaba interpretado por River Phoenix, otro que trae cola, por haber sido un mito en su época, haber muerto tan joven, y, sobre todo, por ser mi cuñado, y es que yo... cuántas veces habré deseado ser la señorita de Cómodo. El monísimo niño que se escondía detrás de esas gafas ahora tan modernas era ni más ni menos que Corey Feldman, al que vosotros siempre recordaréis por su papel en Los Goonies y al que yo no podré olvidar por su papel en The Birthday. No preguntéis. Aún no lo he superado. Y por último, el niño gordito que se transformó en... bueno, iba a decir pivonazo, pero hombre... la cosa es que el cambio es notable, porque pasó de niño gordito, como he dicho antes, a Jerry O'Connell buenorro.
Pero no solo de protagonistas se nutre esta película, entre sus sencundarios también podemos encontrar a un Jack Bauer malote malote y rubiote de bote y a un jovencísimo y con cara alargadísima John Cusack. Muy fuerte todo.
La película me ha encantado. Es una maravillosa historia de amistad (o de amor, porque yo creo que si hubiera Cuenta Conmigo II el prota y su amiguito se verían el pito) y de aventuras sin muchas florituras ni grandes obstáculos que superar, que te mantiene completamente pegado a la pantalla y que te hace querer a esos niños como si fueran tus hijos (porque tienen 12 años, y los únicos que pueden querer a los niños de esa edad de cualquier manera que no sea como hijos son los curas). La banda sonora es buenísima buenísima. Está cargadita de oldies inolvidables que hacen más divertida aún la aventura de estos cuatro chicos.
Una película que os recomiendo a todos, una película que nunca envejecerá ni pasará de moda, porque, como dice el narrador, todos hemos tenido esas grandes amistades de los doce años, y nunca hemos vuelto a tener amigos como los que tuvimos cuando fuimos pequeños. Si hace apenas unos días Toy Story 3 nos recordaba los buenos ratos que pasamos en nuestra infancia gracias a la compañía de nuestros juguetes, Cuenta Conmigo nos recordará siempre lo importante que es la amistad, y lo divertidas que se vuelven las más simples aventuras cuando estás en buena compañía. Un copón de película que siempre tendré en cuenta y que seguro que tarde o temprano acabaré revisando.
Jajajaja... querida Bea, que sepas que tus críticas son mis favoritas del mundo mundial. Y no lo digo de coña, me encanta que cuentes tantas cosas sin tirar por el camino gafapasta, con esa inmediatez tuya, que es de lo más elocuente.
ResponderEliminarPor cierto, me he quedado muerta y enterrada al leer que sale John Cusack. No lo recordaba...
Me alegro mucho, sobre todo por ser todo lo contrario a un gafapasta! :P
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