Sexo en Nueva York fue la primera serie que vi en condiciones... normales. Vamos, que hasta hace un tiempo a mí lo de ver series no me gustaba porque no era capaz de ajustarme a los horarios de la televisión, pero un día descubrí otros métodos para poderlas ver a mi aire, y fue cuando empecé a meterme en el maravilloso mundo de las series. No sé por qué me dio por empezar por esta, supongo que la relación de la serie con la moda me atrajo. La verdad es que fue una buena primera experiencia. Me enganché enseguida, lloré, reí, me encariñé de sus personajes y... se acabó.
Aunque... realmente parece que no se acaba. Primero vino la primera película, que me dejó bastante satisfecha, y ahora acaba de llegar Sexo en Nueva York 2, que, la verdad, me ha dejado bastante decepcionada. No sé si por su culpa, es decir, porque realmente es una mala película, o por la mía, porque mis tiempos de desear vestidores ya pasaron. Sospecho que es por la primera razón, porque aunque es verdad que mi amor por la moda ya se ha calmado bastante y que cosas que antes me volverían loca ahora mismo me dan un poco igual, realmente la película tiene ciertas cosas que son, hasta, si se me permite, vomitivas.
La verdad es que al final de la serie Carrie ya me resultaba algo pesadita, pero la primera película hizo que volviera a ser la tía guay que al principio de la serie era. No obstante, con esta segunda parte han dejado bien claro que Carrie ya no mola una mierda. Y sus preocupaciones, a mí, me importan otra mierda bien grande.
Esta vez, las cuatro amigas se enfrascan en un viaje de lujo al desierto, a Abu Dhabi, más concretamente, gracias a unos negocios de Samantha. Carrie tiene ciertos problemas con su matrimonio porque su marido le ha regalado una tele por su aniversario y cree que volver a estar solas, las cuatro amigas, lejos de su vida en la gran ciudad, será lo mejor que le puede pasar. Allá que se van, y desde el momento que ponen un pie en el avión que las llevará a la otra punta del mundo, las arcadas comienzan a dejarse notar en el espectador. La historia cambia por completo, y en vez de contarnos las aventuras de cuatro mujeres cultas, con buenos trabajos, con buenas familias y buenos zapatos, se nos empieza a contar la historia de cuatro superpijas asquerosas que no son capaces de ver más allá de su nariz y se van a otro país a reírse de la cultura de otros pueblos por considerarlos atrasados.
Llamadme insensible por no saber entender las crisis matrimoniales, pues no tengo ni remota idea sobre qué es el matrimonio ni qué problemas conlleva el convivir día a día con una persona, pero creo que el conflicto que presenta esta película es simplemente una excusa para mostrarnos a las cuatro señoras que luciendo modelazos esta vez muy lejos de Nueva York. Esta película no es más que una sucesión de escenas no muy divertidas y, por supuesto, lejanas al humor y a la ironía a la que esta serie nos tenía acostumbrados, que llegan a cansar y hasta a aburrir.
Eso sí, vamos a resaltar la única cosa que me ha parecido realmente maravillosa y que me ha hecho volver a sentir como cuando me gustaba de verdad esta serie: la boda gayer del principio. Que tampoco tiene absolutamente nada que ver con el resto del argumento, supongo que sería algo así como "mirad, no nos hemos olvidado de estos secundarios", pero el hecho de que cuando seas rico te pueda casar una persona tan famosísima y mitiquísima como Liza Minelli, me devolvió por unos minutos mis deseos de convertirme en una mujer rica de La Sexta.
En definitiva, una película muy mediocre que ha olvidado por completo la esencia de la serie, que aprovecha el tirón de la fama que un día tuvieron Carrie y sus amigas y que se aprovecha de los que todavía teníamos a estas cuatro chicas un cariño especial. Un ojete de dromedario, que, sinceramente, no os recomiendo.
26 jun 2010
24 jun 2010
Noche Loca
Como ahora estoy enamorada de Steve Carell tanto o más como de pequeña lo estuve de Jim Carrey, me trago todas sus películas sin rechistar. Me acuerdo de la primera vez que vi a este buen hombre, en Como Dios, en una escena en que hacía con la boca un montón de tontadas, y ya entonces me dije... "oye, qué tío más gracioso". ¡Quién me iba a decir a mí que años después lo idolatraría como a muy pocos idolatro!
La verdad es que gracias a The Office he podido conocer lo buen actor que es este hombre. Me parece un tío genial. A la que no conocía es a Tina Fey, que también debe ser una de las grandes de la comedia, pero como todavía no he visto nunca su serie... pues no le he cogido cariño.
Noche Loca es bastante simplona y no tiene ningún momento digno de, al menos, un actor como Steve Carell. Sí, la trama es divertida, tiene algunas cosas graciosas, pero nada desternillante. El guión es más flojeras que la salud de Cayetana de Alba, creo que se le podía haber sacado mucho más partido tanto a las situaciones como a los actores. No obsatnte, entretiene, que supongo que es para lo que se hizo.
Así que no voy a decir mucho más. Comedia... medio romántica americana que no ofrece más que una situación divertida tras otra, sin llegar ninguna de ellas a un luegar digno en la historia de la comedia, y que desaprovecha a dos actores que podrían haber dado mucho más de sí mismos. Un ojete de monico muy justico muy justico.
La verdad es que gracias a The Office he podido conocer lo buen actor que es este hombre. Me parece un tío genial. A la que no conocía es a Tina Fey, que también debe ser una de las grandes de la comedia, pero como todavía no he visto nunca su serie... pues no le he cogido cariño.
Supongo que para los amantes de las sitcom americanas, esta peli era todo un bombazo. Para mí, simplemente ha sido una película que me apetecía ver por ver un poco más a Carell. Y la verdad es que la película no tiene mucho de donde tirar, las cosas como son. Más o menos me lo esperaba, que fuera una comedia un poco tonta para recaudar los dineros y aprovechar el tirón de los dos actores, pero por otro lado, algo dentro de mí me decía que tal vez estuviera bien. Ese algo dentro de mí estaba equivocado.
Noche Loca es bastante simplona y no tiene ningún momento digno de, al menos, un actor como Steve Carell. Sí, la trama es divertida, tiene algunas cosas graciosas, pero nada desternillante. El guión es más flojeras que la salud de Cayetana de Alba, creo que se le podía haber sacado mucho más partido tanto a las situaciones como a los actores. No obsatnte, entretiene, que supongo que es para lo que se hizo.
Así que no voy a decir mucho más. Comedia... medio romántica americana que no ofrece más que una situación divertida tras otra, sin llegar ninguna de ellas a un luegar digno en la historia de la comedia, y que desaprovecha a dos actores que podrían haber dado mucho más de sí mismos. Un ojete de monico muy justico muy justico.
22 jun 2010
El bosque del lobo
Soy una gran defensora del cine español, y por eso procuro ver cuantas más películas mejor. Nunca he sentido que el cine español sea inferior al cine de otros países, y nunca desaprovecho una oportunidad para conocer otro nuevo título de la amplísima lista de títulos rodados en este país. No entiendo tampoco a aquellos que menosprecian el cine patrio, aunque respeto las opiniones de todo el mundo. Pero hay que tener en cuenta que el cine español no fueron solo títulos como Los bingueros, La ciudad no es para mí o Torrente, películas que generalmente suelen ser calificadas de "españoladas" pero que a mí me parecen muy dignas. Otra cosa es que nos gusten o no.
Pero bueno, este no es el debate. Lo que yo quería decir y todavía no he dicho es que el cine español está lleno de rincones desconocidos que son, generalmente, no sólo sorprendentes, sino también muy interesantes. Últimamente me ha dado por las rarezas, y así, esta vez le ha tocado el turno a El bosque del lobo.
En esta película, protagonizada por un alucinante José Luis López Vázquez, se cuenta una historia basada en hechos reales. En hechos reales e insólitos, como diría mi querido Iker Jiménez. Y es que El bosque del lobo cuental una historia tan real como raruna: el caso del único hombre lobo atestiguado en España. Al parecer, un tal Manuel Blanco Romasanta fue detenido y acusado de varios crímenes cometidos a mediados del siglo XIX. Lo raro no es que el acusado afirmase haber cometido esos asesinatos, es que afirmó haberlos cometido bajo la forma de un lobo. Vamos, que el hombrecico este se creía un hombre lobo y lo que le pasaba es que... no había nadie al volante en su mollera.
Esta historia pasó al cine en el año 1970. La película no hace tanto hincapié en los crímenes, sino en la historia del criminal. Intenta explicarnos la historia desde el punto de vista del lobishome, aunque esta no es una película de terror ni de fantasía, por lo tanto, ni hay transformación en lobo ni aullidos a la luna llena. La película es un drama totalmente realista, y además, si se me permite, un drama de los gordos. Me ha recordado en ciertos momentos a El Crimen de Cuenca, tal vez por empezar y terminar con un pregonero cantando el romance del hombre lobo gallego, aunque también por la crudeza de su historia. También me ha recordado a historias tan arraigadas a lo español y tan dramáticas como las de Miguel Delibes que han sido llevadas a la gran pantalla, por ejemplo Los Santos Inocentes. Realmente este no es un tipo de cine que me guste ver, pues no disfruto con él, todavía me parece demasiado duro. En la España profunda hubo casos tan terroríficos que no se necesitan adornos fantasiosos para crear desasosiego con la verdad.
La película es muy interesante y muy recomendable. El guión es muy acertado, pues prefiere contar los hechos sin recurrir a las mitificaciones y leyendas, presentándonos como protagonista a un pobre hombre que comete asesinatos a causa de una esquizofrenia. El guión también es capaz de recrear una atmósfera perfecta para que la trama se desarrolle, e introduce al espectador en la Galicia más profunda y más naturalista, maravillosa y cruel a la vez.
He quedado muy contenta con el resultado de esta película. No es el tipo de cine que yo suelo preferir, pero realmente merece la pena echarle un vistazo a esta película, sobre todo si se siente tanta curiosidad como siento yo, tanto por toda la trayectoria del cine español como por la intrahistoria de España. Un copón de película, vaya.
Pero bueno, este no es el debate. Lo que yo quería decir y todavía no he dicho es que el cine español está lleno de rincones desconocidos que son, generalmente, no sólo sorprendentes, sino también muy interesantes. Últimamente me ha dado por las rarezas, y así, esta vez le ha tocado el turno a El bosque del lobo.
En esta película, protagonizada por un alucinante José Luis López Vázquez, se cuenta una historia basada en hechos reales. En hechos reales e insólitos, como diría mi querido Iker Jiménez. Y es que El bosque del lobo cuental una historia tan real como raruna: el caso del único hombre lobo atestiguado en España. Al parecer, un tal Manuel Blanco Romasanta fue detenido y acusado de varios crímenes cometidos a mediados del siglo XIX. Lo raro no es que el acusado afirmase haber cometido esos asesinatos, es que afirmó haberlos cometido bajo la forma de un lobo. Vamos, que el hombrecico este se creía un hombre lobo y lo que le pasaba es que... no había nadie al volante en su mollera.
Esta historia pasó al cine en el año 1970. La película no hace tanto hincapié en los crímenes, sino en la historia del criminal. Intenta explicarnos la historia desde el punto de vista del lobishome, aunque esta no es una película de terror ni de fantasía, por lo tanto, ni hay transformación en lobo ni aullidos a la luna llena. La película es un drama totalmente realista, y además, si se me permite, un drama de los gordos. Me ha recordado en ciertos momentos a El Crimen de Cuenca, tal vez por empezar y terminar con un pregonero cantando el romance del hombre lobo gallego, aunque también por la crudeza de su historia. También me ha recordado a historias tan arraigadas a lo español y tan dramáticas como las de Miguel Delibes que han sido llevadas a la gran pantalla, por ejemplo Los Santos Inocentes. Realmente este no es un tipo de cine que me guste ver, pues no disfruto con él, todavía me parece demasiado duro. En la España profunda hubo casos tan terroríficos que no se necesitan adornos fantasiosos para crear desasosiego con la verdad.
La película es muy interesante y muy recomendable. El guión es muy acertado, pues prefiere contar los hechos sin recurrir a las mitificaciones y leyendas, presentándonos como protagonista a un pobre hombre que comete asesinatos a causa de una esquizofrenia. El guión también es capaz de recrear una atmósfera perfecta para que la trama se desarrolle, e introduce al espectador en la Galicia más profunda y más naturalista, maravillosa y cruel a la vez.
He quedado muy contenta con el resultado de esta película. No es el tipo de cine que yo suelo preferir, pero realmente merece la pena echarle un vistazo a esta película, sobre todo si se siente tanta curiosidad como siento yo, tanto por toda la trayectoria del cine español como por la intrahistoria de España. Un copón de película, vaya.
20 jun 2010
The IT Crowd
Me habían hablado muy bien de esta serie, y como últimamente estoy que me lo veo todo, pues me hice con la primera temporada para echarle un vistazo. Vistazo echado, ahora mismo lo único que puedo decir es que no me ha parecido para tanto.
Es verdad que, en general, está bastante bien, es divertida, tiene un par de puntazos, pero... nada del otro mundo. De todas formas, esta opinión que yo tengo no creo que sea culpa de la serie, sino de The Office, que me tiene absorbido el cerebro. Es que, qué queréis qué os diga. El jefe de los de The IT Crowd al lado de Michael Scott... pues tiene mucha menos gracia, y por muy frikis que sean los protas... no puedo de dejar de pensar en Sheldon, y pienso que les da mil vueltas.
Quizá si hubiera visto la serie en su momento, o en otro momento simplemente, la hubiera valorado de otra forma, pero ahora mismo lo que pienso es que hay sitcoms mucho mejores, aunque esta, repito, tampoco está mal.
Por si alguno no ha oído hablar nunca de ella, The IT Crowd es una serie sobre el departamento de informática de una gran empresa británica. A este departamento se une una mujer que no tiene ni idea de cómo funciona un ordenador y que tiene que trabajar con dos auténticos freaks que ven el mundo... de otra manera.
La serie tiene su gracia, sí, pero ni ninguno de sus personajes ha logrado conquistar mi corazoncito ni tampoco la he visto como una comedia brillante que realmente merece la pena, por eso, por ahora no tengo intenciones de seguir con la segunda temporada. ¡Antes acabaré con The Office!
Así que le he puesto un ojete de monico, no porque piense que sea mala, sino porque la verdad es que esperaba mucho más de ella y al final se ha convertido, para mí, en una serie para pasar el rato, sin nada que la haya hecho muy especial. No obstante, si alguno de vosotros la ha visto y tiene una opinión totalmente contraria a la mía, que lo diga, a ver si así me animo a darle otra oportunidad con la segunda temporada.
Es verdad que, en general, está bastante bien, es divertida, tiene un par de puntazos, pero... nada del otro mundo. De todas formas, esta opinión que yo tengo no creo que sea culpa de la serie, sino de The Office, que me tiene absorbido el cerebro. Es que, qué queréis qué os diga. El jefe de los de The IT Crowd al lado de Michael Scott... pues tiene mucha menos gracia, y por muy frikis que sean los protas... no puedo de dejar de pensar en Sheldon, y pienso que les da mil vueltas.
Quizá si hubiera visto la serie en su momento, o en otro momento simplemente, la hubiera valorado de otra forma, pero ahora mismo lo que pienso es que hay sitcoms mucho mejores, aunque esta, repito, tampoco está mal.
Por si alguno no ha oído hablar nunca de ella, The IT Crowd es una serie sobre el departamento de informática de una gran empresa británica. A este departamento se une una mujer que no tiene ni idea de cómo funciona un ordenador y que tiene que trabajar con dos auténticos freaks que ven el mundo... de otra manera.
La serie tiene su gracia, sí, pero ni ninguno de sus personajes ha logrado conquistar mi corazoncito ni tampoco la he visto como una comedia brillante que realmente merece la pena, por eso, por ahora no tengo intenciones de seguir con la segunda temporada. ¡Antes acabaré con The Office!
Así que le he puesto un ojete de monico, no porque piense que sea mala, sino porque la verdad es que esperaba mucho más de ella y al final se ha convertido, para mí, en una serie para pasar el rato, sin nada que la haya hecho muy especial. No obstante, si alguno de vosotros la ha visto y tiene una opinión totalmente contraria a la mía, que lo diga, a ver si así me animo a darle otra oportunidad con la segunda temporada.
19 jun 2010
La herencia Valdemar
Cuando se estrenó esta película en el cine, causó cierta polémica, aunque poca, porque pasó más bien desapercibida. La poca polémica que causó giraba en torno a si esta película era o no caca de la vaca. Y yo, que siempre pico, quise tener mi propia opinión, y para eso tenía que verla. Lo que pasa es que por lo que fuera no fui a verla en su momento al cine, y he tenido que esperar hasta ahora para poder forjar mi opinión.
Ahora, una vez vista, la verdad es que no sé muy bien qué decir. Bueno, intentaré empezar por el principio. Lo primero que me gustaría decir es que no me ha parecido una mierda en absoluta. Es raruna, tiene un cierto tufillo a algo raro y rancio, pero... creo que se defiende más o menos ella solita. Lo malo que tiene, que no es poco, es que es más caótica que una morería. Arranca de una manera, además bastante inquietante, crea muchas dudas, y de repente se va a una historia totalmente diferente para terminar dejando sin acabar nada de lo que ha empezado.
Es que no sé si sabeis, pero esta película es solo la mitad de una película. Es decir, acaba sin solucionar muchas cosas dejándote ahí con la cosica de "ay madre, qué pasará ahora". Y lo que pasa es que se acaba. Eso es una putada, porque si quiero ver una peli en dos capítulos, me veo una miniserie o una TVmovie. Porque no es que sea una primera parte de una saga, no, es que la película no cierra las tramas que abre, se necesita la otra mitad.
Eso es lo que menos me ha gustado, eso de dejarle a uno con las ganas. Pero por otro lado, hay otras cosas que, aunque no me parecen gloria pura, me ha apetecido verlas. La primera, por supuesto, es volver a ver a Paul Naschy, que aunque el pobre está viejunísimo, pues siempre da gustico ver. La segunda es ese halo de misterio decimonónico, de terror asociado a lo paranormal que a mí tanto me gusta. Parece que las historias clásicas de fantasmas, de ouijas y demás ya estaban pasadas de moda, que los vampiros ya no son lo que eran y que ahora nos asustan otras cosas, y la verdad es que me apetecía la vuelta a este tipo de terror tan intrigante y tan inquietante.
Pero no me puedo quedar con esta parte de la peli, porque otras muchas cosas malas pesan. Pero bueno, ya puedo decir que he visto La Herencia Valdemar, y ya puedo dar mi opinión sobre ella, y mi opinión es que es una película que vale para bien poco, para un rato entretenido y ni eso, porque al final te deja con el gusanillo. Tiene cosas buenas, pero yo creo que resaltan más las malas, aunque aún así, se deja ver. Finalmente he decidido dejarla con un ajustadísimo ojete de monico.
Ahora, una vez vista, la verdad es que no sé muy bien qué decir. Bueno, intentaré empezar por el principio. Lo primero que me gustaría decir es que no me ha parecido una mierda en absoluta. Es raruna, tiene un cierto tufillo a algo raro y rancio, pero... creo que se defiende más o menos ella solita. Lo malo que tiene, que no es poco, es que es más caótica que una morería. Arranca de una manera, además bastante inquietante, crea muchas dudas, y de repente se va a una historia totalmente diferente para terminar dejando sin acabar nada de lo que ha empezado.
Es que no sé si sabeis, pero esta película es solo la mitad de una película. Es decir, acaba sin solucionar muchas cosas dejándote ahí con la cosica de "ay madre, qué pasará ahora". Y lo que pasa es que se acaba. Eso es una putada, porque si quiero ver una peli en dos capítulos, me veo una miniserie o una TVmovie. Porque no es que sea una primera parte de una saga, no, es que la película no cierra las tramas que abre, se necesita la otra mitad.
Eso es lo que menos me ha gustado, eso de dejarle a uno con las ganas. Pero por otro lado, hay otras cosas que, aunque no me parecen gloria pura, me ha apetecido verlas. La primera, por supuesto, es volver a ver a Paul Naschy, que aunque el pobre está viejunísimo, pues siempre da gustico ver. La segunda es ese halo de misterio decimonónico, de terror asociado a lo paranormal que a mí tanto me gusta. Parece que las historias clásicas de fantasmas, de ouijas y demás ya estaban pasadas de moda, que los vampiros ya no son lo que eran y que ahora nos asustan otras cosas, y la verdad es que me apetecía la vuelta a este tipo de terror tan intrigante y tan inquietante.
Pero no me puedo quedar con esta parte de la peli, porque otras muchas cosas malas pesan. Pero bueno, ya puedo decir que he visto La Herencia Valdemar, y ya puedo dar mi opinión sobre ella, y mi opinión es que es una película que vale para bien poco, para un rato entretenido y ni eso, porque al final te deja con el gusanillo. Tiene cosas buenas, pero yo creo que resaltan más las malas, aunque aún así, se deja ver. Finalmente he decidido dejarla con un ajustadísimo ojete de monico.
16 jun 2010
Así en el cielo como en la tierra
Hace muchos, muchos años, un día, paseando mi madre y yo por la calle, vimos en un kiosko que vendían una especie de pack de dos dvds: Amanece que no es poco y Así en el cielo como en la tierra. Fueron mis primeros dvds. ¡Qué emotivo todo! Mi madre compró estas películas porque las recordaba muy divertidas y yo, como eran mis primeros dvds y me hacía ilusión, pues me las vi enseguida, pero me gustaron regular. De esto que te hacen gracia pero que no te parecen maravillosas.
Los años pasaron, y, con el tiempo Amanece que no es poco se ha colocado entre mis películas favoritas. Poco a poco he aprendido a apreciar su genialidad y ahora sé que es una película que jamás podré olvidar y que siempre tendré como referencia.
Desde aquel momento no había vuelto a ver Así en el cielo como en la tierra, y de repente el otro día me apeteció volver a verla. Últimamente solo me apetece ver comedia... será la crisis. Y mientras que mi opinión hacia Amanece que no es poco ha cambiado por completo en todos estos años, mi opinión sobre Así en el cielo como en la tierra se ha quedado exactamente igual.
Con un poco más de conocimiento de causa puedo reiterarme en que esta película no es más que una película divertida y muy interesante, pero no puede ni arrimarse a lo que fue Amanece que no es poco. Además, me parece una burda copia, un segundo intento de volver a hacer algo tan grande como Amanece... y... sinceramente, en este caso la comparación es más odiosa que nunca, porque Así en el cielo... se queda muy atrás.
Así en el cielo como en la tierra (si es que son unos títulos enormes) va sobre el cielo. Sí, el cielo, ese sitio a donde irán los cristianos después de muertos. Tiene gracia ver a Fernando Fernán Gómez interpretar a Dios, ver a Jesús Bonilla haciendo de un Jesucristo más campechano que el rey, y... poco más. Además, aunque a mí me encantan las comedias asentadas en los pueblos, porque a mí los pueblos me parecen muy cómicos ya de por sí, esta me huele a rancio que tira para atrás. Será por tanta banderita de España y tanta referencia cargante a la España franquista.
Es que este segundo visionado casi me ha hecho daño en el corazón. Me gustaría equivocarme, pero me da la sensación de que Cuerda, su director, quiso hacer una especie de La Vida de Brian a la española aprovechando también el éxito que cosechó con su hilarante estilo de comedia de Amanece que no es poco, y eso me jode. Además, si eso es lo que le intentó, la copia le ha quedado regulera.
Vamos, que la película es muy interesante, no os digo que no, pero no me parece buena ni nada por el estilo. El reparto es de lujo, y es una pena que no brille tanto como debiera porque todo suena ya un poco a visto. Aunque los diálogos tienen momentos muy divertidos, con mucha referencia a la Biblia y a todo lo religioso, la verdad es que el guión, en conjunto, tampoco es para tanto.
Yo le voy a poner un ojete de monico, porque para nada se merece estar dentro de las películas que no son un ojete, aunque tampoco es que ésta sea un ojete por excelencia.
Los años pasaron, y, con el tiempo Amanece que no es poco se ha colocado entre mis películas favoritas. Poco a poco he aprendido a apreciar su genialidad y ahora sé que es una película que jamás podré olvidar y que siempre tendré como referencia.
Desde aquel momento no había vuelto a ver Así en el cielo como en la tierra, y de repente el otro día me apeteció volver a verla. Últimamente solo me apetece ver comedia... será la crisis. Y mientras que mi opinión hacia Amanece que no es poco ha cambiado por completo en todos estos años, mi opinión sobre Así en el cielo como en la tierra se ha quedado exactamente igual.
Con un poco más de conocimiento de causa puedo reiterarme en que esta película no es más que una película divertida y muy interesante, pero no puede ni arrimarse a lo que fue Amanece que no es poco. Además, me parece una burda copia, un segundo intento de volver a hacer algo tan grande como Amanece... y... sinceramente, en este caso la comparación es más odiosa que nunca, porque Así en el cielo... se queda muy atrás.
Así en el cielo como en la tierra (si es que son unos títulos enormes) va sobre el cielo. Sí, el cielo, ese sitio a donde irán los cristianos después de muertos. Tiene gracia ver a Fernando Fernán Gómez interpretar a Dios, ver a Jesús Bonilla haciendo de un Jesucristo más campechano que el rey, y... poco más. Además, aunque a mí me encantan las comedias asentadas en los pueblos, porque a mí los pueblos me parecen muy cómicos ya de por sí, esta me huele a rancio que tira para atrás. Será por tanta banderita de España y tanta referencia cargante a la España franquista.
Es que este segundo visionado casi me ha hecho daño en el corazón. Me gustaría equivocarme, pero me da la sensación de que Cuerda, su director, quiso hacer una especie de La Vida de Brian a la española aprovechando también el éxito que cosechó con su hilarante estilo de comedia de Amanece que no es poco, y eso me jode. Además, si eso es lo que le intentó, la copia le ha quedado regulera.
Vamos, que la película es muy interesante, no os digo que no, pero no me parece buena ni nada por el estilo. El reparto es de lujo, y es una pena que no brille tanto como debiera porque todo suena ya un poco a visto. Aunque los diálogos tienen momentos muy divertidos, con mucha referencia a la Biblia y a todo lo religioso, la verdad es que el guión, en conjunto, tampoco es para tanto.
Yo le voy a poner un ojete de monico, porque para nada se merece estar dentro de las películas que no son un ojete, aunque tampoco es que ésta sea un ojete por excelencia.
15 jun 2010
Campamento Flipy
Desde que me enteré de que los muchachos estaban grabando una película en Asturias no he parado de seguir el proyecto Campamento Flipy hasta que, por fin, he ido a verla al cine. No ha sido nada fácil, porque aunque, os voy a ser sinceros, era una película que tenía pensado verla en casa (dedúzcase el delito), la verdad es que siempre prefiero el cine a mi dulce hogar, hasta para chorradas como estas. Lo que pasa es que, al principio, mis amigos zamoranos no querían ir a verla, luego me enteré de que en Zamora no iban ni siquiera a estrenarla, y ya, casi cuando me había dado por vencida, resulta que Héber, gran amigo y mejor coguionista, también tenía curiosidad por verla, así que ayer por la noche fuimos los dos junticos al cine a Salamanca a ver esta peli.
Los dos entramos en el cine sabiendo perfectamente a lo que nos íbamos a exponer. Yo iba pensando en una basura absoluta que sólo serviría para entretenerme y reírme un poco, pero... ¡que va! ¡Todo fueron sorpresas!
La primera sorpresa fue que, en esta peli, en vez de haber trailers y anuncios cutrones antes de la peli, te ponían un corto de Enjuto Mojamuto. Empezábamos muy pero que muy bien, porque Enjuto dijo "siberet" así como cinco veces seguidas y a mí con eso ya me bastó para partirme.
Luego empezó la película, y... ¡otra sorpresa que me llevé! ¡Dibujos animados! La peli empezaba recurriendo a la animación para que un muñeco de Flipy doblado por Flipy nos explicase un poco de qué iba a ir la película y soltara uno de los chistes más bestias que he oído en mi vida. Volví a partirme y ya me quedé mucho más relajada porque intuía que esta película me iba a gustar mucho más de lo que esperaba.
Y así fue, la primera mitad de la película es absolutamente desternillante, con momentazos que yo creo que pasarán a la historia de las chorradazas grabadas por una cámara. ¡Qué de momentos brillantes! ¡Y cuántos otros que eran puta basura, las cosas como son! Pero qué más da, joder, estaba Carlos Areces.
Otra de las cosas que más me gustó de esta primera mitad de la película fueron los créditos de la película, que salían a ritmo de "caca culo pedo pis", una de mis canciones favoritas de la infancia, recuperada ahora por Flipy de un modo maravilloso. A ver si me la bajo para mi mp3 cuanto antes.
Es absolutamente maravillosa. Y no os perdais a Aníbal el de Ojete Calor dándolo todo en los teclados. Yo cuando vi esto ya no sabía si llorar de la emoción o aplaudir estruendosamente. Me pareció sublime.
Y bueno, pues eso, que la primera mitad de la peli, o los primeros 45 minutos, más bien, son bastante apetecibles, pero el resto... de repente algo pasa con esta película que cae cae y cae y se estrella, y nos deja a todos picuetos porque ya no nos volvemos a reir en todo el tiempo que queda. Bueno, y otra cosa que no es muy apetecible, a mi modo de ver, es el abuso de los chistes y los gags que recurren a la caca y a las cosas sucias y escatológicas para buscar el humor. Hay momentos asquerosos que no tienen mucha gracia, pero luego de repente Carlos Areces está leyendo un periódico cuya portada es la noticia del niño murciélago y olvidas todo lo demás para pensar: "sí,, joder, lo han vuelto a hacer". La verdad es que la película está completamente cargada de referencias ultrafrikis que dan un gustico que no veais.
Si no hubiera sido por ese final tan regulero, la película habría hecho historia en mi lsita de comedias favoritas, pero claro, es que... ¡menudo finalazo se marcaron! Es más absurdo que los extraterrestres de La Vida de Brian. Así que se ha quedado la pobre solamente en el ojete de monico, aunque por momentos estuvo cerca de la gloria del copón. Recomendada solo para gente muy tontaca y muy gilipó que le encanta tragarse la mierda que hacen gentuza como Flipy, Areces, Ernesto Sevilla y demás.
Los dos entramos en el cine sabiendo perfectamente a lo que nos íbamos a exponer. Yo iba pensando en una basura absoluta que sólo serviría para entretenerme y reírme un poco, pero... ¡que va! ¡Todo fueron sorpresas!
La primera sorpresa fue que, en esta peli, en vez de haber trailers y anuncios cutrones antes de la peli, te ponían un corto de Enjuto Mojamuto. Empezábamos muy pero que muy bien, porque Enjuto dijo "siberet" así como cinco veces seguidas y a mí con eso ya me bastó para partirme.
Luego empezó la película, y... ¡otra sorpresa que me llevé! ¡Dibujos animados! La peli empezaba recurriendo a la animación para que un muñeco de Flipy doblado por Flipy nos explicase un poco de qué iba a ir la película y soltara uno de los chistes más bestias que he oído en mi vida. Volví a partirme y ya me quedé mucho más relajada porque intuía que esta película me iba a gustar mucho más de lo que esperaba.
Y así fue, la primera mitad de la película es absolutamente desternillante, con momentazos que yo creo que pasarán a la historia de las chorradazas grabadas por una cámara. ¡Qué de momentos brillantes! ¡Y cuántos otros que eran puta basura, las cosas como son! Pero qué más da, joder, estaba Carlos Areces.
Otra de las cosas que más me gustó de esta primera mitad de la película fueron los créditos de la película, que salían a ritmo de "caca culo pedo pis", una de mis canciones favoritas de la infancia, recuperada ahora por Flipy de un modo maravilloso. A ver si me la bajo para mi mp3 cuanto antes.
Es absolutamente maravillosa. Y no os perdais a Aníbal el de Ojete Calor dándolo todo en los teclados. Yo cuando vi esto ya no sabía si llorar de la emoción o aplaudir estruendosamente. Me pareció sublime.
Y bueno, pues eso, que la primera mitad de la peli, o los primeros 45 minutos, más bien, son bastante apetecibles, pero el resto... de repente algo pasa con esta película que cae cae y cae y se estrella, y nos deja a todos picuetos porque ya no nos volvemos a reir en todo el tiempo que queda. Bueno, y otra cosa que no es muy apetecible, a mi modo de ver, es el abuso de los chistes y los gags que recurren a la caca y a las cosas sucias y escatológicas para buscar el humor. Hay momentos asquerosos que no tienen mucha gracia, pero luego de repente Carlos Areces está leyendo un periódico cuya portada es la noticia del niño murciélago y olvidas todo lo demás para pensar: "sí,, joder, lo han vuelto a hacer". La verdad es que la película está completamente cargada de referencias ultrafrikis que dan un gustico que no veais.
Si no hubiera sido por ese final tan regulero, la película habría hecho historia en mi lsita de comedias favoritas, pero claro, es que... ¡menudo finalazo se marcaron! Es más absurdo que los extraterrestres de La Vida de Brian. Así que se ha quedado la pobre solamente en el ojete de monico, aunque por momentos estuvo cerca de la gloria del copón. Recomendada solo para gente muy tontaca y muy gilipó que le encanta tragarse la mierda que hacen gentuza como Flipy, Areces, Ernesto Sevilla y demás.
13 jun 2010
28 días después
Como yo he sido amante del terror de toda la vida, cuando estrenaron esta película recuerdo haber ido al cine a verla. Y como era amante del terror y esperaba pasar miedo, la película me pareció una mierda. Además, nunca he sido yo muy fan de las pelis de zombies hasta hace dos o tres años, que ya he empezado a apreciarlas y a quererlas. Con lo cual tenía mal recuerdo de 28 días después y un interés inexistente por volver a verla hasta... hace unos meses.
La verdad es que no recordaba prácticamente nada de la película, solo el arranque, cuando un joven se despierta en un hospital y resulta que no hay nada de nada a su alrededor. Recordaba las impactantes imágenes de un Londres totalmente vacío y abandonado. Y poco más, por eso me costaba tanto entender que esta película pudiera ser realmente buena.
Pero la insistencia de algunos y la defensa a ultranza de otros me hizo plantearme que quizás necesitaría un revisionado, y más ahora, que ya me había declarado públicamente amante de las pelis de zombies.
28 días después arranca 28 días después de que un virus se extendiera por toda Inglaterra. Un joven se despierta en un hospital y descubre que la gente ha desaparecido y que todo está abandonado... hasta que se topa con los infectados y se da cuenta de que es un poco peligroso andar por ahí alegremente. Afortunadamente pronto conoce a una pareja de humanos como Dios manda, de los que no tienen ojos rojos ni nada, y ya empieza a aceptar lo que ha ocurrido a su alrededor. Pero una vez aceptado, empieza lo peor, que es sobrevivir.
Que por cierto, el chico este que se despierta en el hospital... vamos, el protagonista... ¡cuántos quebraderos de cabeza me ha dado! Yo creo que no he prestado atención a los diez primeros minutos en los que aparece él porque he estado pensando: "¿De qué me suena éste, de qué me suena...? ¡Jolín como me suena!" Hasta que por fin caí: es un malo malote de las nuevas pelis de Batman de Nolan... y está mucho más mono de moreno, a mi parecer.
Pues en esta segunda oportunidad, por fin, 28 días después me ha gustado. Me ha gustado porque me ha recordado a otras muchas películas, lo cual me ha hecho suponer que esta película ha marcado un estilo en el género zombie del siglo XXI, he visto algo de [Rec], y también he visto que Dead Set está muy inspirada en esta película. De todas formas, no me extraña. La ambientación, la creación de esa atmósfera apocalíptica, la fotografía, la realización... bueno, realmente todo, para que me voy a poner a nombrar, está cuidado al milímetro y perfectamente encajado para lograr esa sensación tan desoladora que busca esta película. Aunque quizá he quedado un poco saturada de Laocoonte siendo devorado, que cada vez que el director tenía ocasión, lo sacaba.
Lo que menos me ha gustado, y me ha parecido hasta un poco horrible y todo, es el final, que no os contaré pero os criticaré. Bueno no, porque si os lo critico tengo que contarlo. Así que nada, simplemente que conste en acta que el final no me ha gustado nada, aunque me ha dejado con ganas de ver 28 semanas después, película que en su momento no quise ver porque no me había gustado la primera, pero que ahora tengo muchas ganas.
Finalmente, 28 días después consigue dar un gran salto en mi lista de votaciones de películas, y no solo pasa del suspenso al aprobado sino que consigue un copón de película y todo.
La verdad es que no recordaba prácticamente nada de la película, solo el arranque, cuando un joven se despierta en un hospital y resulta que no hay nada de nada a su alrededor. Recordaba las impactantes imágenes de un Londres totalmente vacío y abandonado. Y poco más, por eso me costaba tanto entender que esta película pudiera ser realmente buena.
Pero la insistencia de algunos y la defensa a ultranza de otros me hizo plantearme que quizás necesitaría un revisionado, y más ahora, que ya me había declarado públicamente amante de las pelis de zombies.
28 días después arranca 28 días después de que un virus se extendiera por toda Inglaterra. Un joven se despierta en un hospital y descubre que la gente ha desaparecido y que todo está abandonado... hasta que se topa con los infectados y se da cuenta de que es un poco peligroso andar por ahí alegremente. Afortunadamente pronto conoce a una pareja de humanos como Dios manda, de los que no tienen ojos rojos ni nada, y ya empieza a aceptar lo que ha ocurrido a su alrededor. Pero una vez aceptado, empieza lo peor, que es sobrevivir.
Que por cierto, el chico este que se despierta en el hospital... vamos, el protagonista... ¡cuántos quebraderos de cabeza me ha dado! Yo creo que no he prestado atención a los diez primeros minutos en los que aparece él porque he estado pensando: "¿De qué me suena éste, de qué me suena...? ¡Jolín como me suena!" Hasta que por fin caí: es un malo malote de las nuevas pelis de Batman de Nolan... y está mucho más mono de moreno, a mi parecer.
Pues en esta segunda oportunidad, por fin, 28 días después me ha gustado. Me ha gustado porque me ha recordado a otras muchas películas, lo cual me ha hecho suponer que esta película ha marcado un estilo en el género zombie del siglo XXI, he visto algo de [Rec], y también he visto que Dead Set está muy inspirada en esta película. De todas formas, no me extraña. La ambientación, la creación de esa atmósfera apocalíptica, la fotografía, la realización... bueno, realmente todo, para que me voy a poner a nombrar, está cuidado al milímetro y perfectamente encajado para lograr esa sensación tan desoladora que busca esta película. Aunque quizá he quedado un poco saturada de Laocoonte siendo devorado, que cada vez que el director tenía ocasión, lo sacaba.
Lo que menos me ha gustado, y me ha parecido hasta un poco horrible y todo, es el final, que no os contaré pero os criticaré. Bueno no, porque si os lo critico tengo que contarlo. Así que nada, simplemente que conste en acta que el final no me ha gustado nada, aunque me ha dejado con ganas de ver 28 semanas después, película que en su momento no quise ver porque no me había gustado la primera, pero que ahora tengo muchas ganas.
Finalmente, 28 días después consigue dar un gran salto en mi lista de votaciones de películas, y no solo pasa del suspenso al aprobado sino que consigue un copón de película y todo.
9 jun 2010
El rey pasmado
Pocas veces le digo que no a una película española, y mucho menos a una que viene avalada por una gran cantidad de premios Goya. Además, ésta estaba "protagonizada" (parece más un secundario que el protagonista, aunque la historia gire en torno a él) por uno de mis actores españoles favoritos, Gabino Diego, quien por su papel en esta película había conseguido muchos elogios así que... no tenía excusa para no haber visto todavía El rey pasmado.
No tenía ni la menor idea del argumento de la película, aunque bueno, algo me imaginaba. Sabía que era de época, sabía que había un rey... y poco más. Y descubrir la trama de esta película es lo que más me ha gustado. Hacía mucho tiempo que no veía una historia tan atrayente como ésta. ¡Qué conflicto tan simple, y qué bien exprimido!
Resulta que la película arranca simple y llanamente (e irónicamente también) cuando el rey pasa una noche con una prostituta y, al despertarse, la ve desnuda. Entonces descubre lo bello que es el cuerpo desnudo de una mujer y, teninendo él una, a la reina, se empeña en verla desnuda a ella también. Este hecho provoca toda una revolución en la corte dentro de la cual toda persona de importancia toma partido, pues al parecer, no está bien que un hombre quiera ver a su esposa desnuda, y mucho menos el rey.
De un hecho tan insignificante se levanta una película entera, mil tramas alrededor de la figura del rey, que, pasmado completamente por aquello que había visto, no quiere cesar en su empeño de contemplar el cuerpo de su mujer.
Aunque se alabó mucho el papel de Gabino Diego en esta película, y bueno, no seré yo quien diga que no lo hace estupendamente, mi opinión es que su interpretación, perfecta hasta en los andares, pasa totalmente desapercibida al lado de la majestuosidad de Juan Diego, que interpreta a un monje capuchino que solo piensa en Dios y en las tentaciones del diablo.
Hay una escena en esta película, la escena central, larga y maravillosa, que me parece esencial para entender el tono de El rey pasmado y para alabar el trabajo tanto de dirección como de los magníficos actores que trabajan en esta película. La película no es que sea una obra maestra ni una obra de referencia en el humor, pero esta escena, en la que Juan Diego brilla, merece la pena ser vista. En esta escena están reunidos todos los hombres de Dios, moderados por el inquisidor, interpretado por Fernán Gómez, discutiendo si es pecado o no que el rey vea a la reina desnuda. Me parece una escena en la que el trabajo de guión que hay detrás de esta película, que también es destacable, sale a la luz por boca de unos personajes divertidísimos, una escena casi paródica, cargada de sarcasmo que demuestra a qué altura está esta película.
En general, como ya he dicho, no es El rey pasmado la comedia por excelencia del cine español, pero creo que cualquier amante de este género no debería perdérsela porque la sutileza y la ironía que pueblan todas sus escenas y que hacen de esta película, además de un maravilloso entretenimiento, una crítica a la sociedad más rancia y retrógrada que todavía hoy en día camina por España, son difíciles de encontrar con un aire tan fresco y moderno como el de esta película.
No quería, sin embargo, terminar mi comentario sin hacer una mención especial a la dirección artística de esta película. No es éste un aspecto en el que yo suela centrar mi atención. Lo mío es el guión. Pero sí me considero amante de la pintura, que no entendida, y amante de Velázquez también, y por eso he podido darme cuenta de la cantidad de referencias al gran pintor español que pueblan esta película y que la hacen tan barroca como deliciosa. La dirección artística consiguió el Goya en su año, y no es de extrañar, pues logran crear un marco sublime para una historia tan ingeniosa como es El rey pasmado. Un copón de película para ella.
No tenía ni la menor idea del argumento de la película, aunque bueno, algo me imaginaba. Sabía que era de época, sabía que había un rey... y poco más. Y descubrir la trama de esta película es lo que más me ha gustado. Hacía mucho tiempo que no veía una historia tan atrayente como ésta. ¡Qué conflicto tan simple, y qué bien exprimido!
Resulta que la película arranca simple y llanamente (e irónicamente también) cuando el rey pasa una noche con una prostituta y, al despertarse, la ve desnuda. Entonces descubre lo bello que es el cuerpo desnudo de una mujer y, teninendo él una, a la reina, se empeña en verla desnuda a ella también. Este hecho provoca toda una revolución en la corte dentro de la cual toda persona de importancia toma partido, pues al parecer, no está bien que un hombre quiera ver a su esposa desnuda, y mucho menos el rey.
De un hecho tan insignificante se levanta una película entera, mil tramas alrededor de la figura del rey, que, pasmado completamente por aquello que había visto, no quiere cesar en su empeño de contemplar el cuerpo de su mujer.
Aunque se alabó mucho el papel de Gabino Diego en esta película, y bueno, no seré yo quien diga que no lo hace estupendamente, mi opinión es que su interpretación, perfecta hasta en los andares, pasa totalmente desapercibida al lado de la majestuosidad de Juan Diego, que interpreta a un monje capuchino que solo piensa en Dios y en las tentaciones del diablo.
Hay una escena en esta película, la escena central, larga y maravillosa, que me parece esencial para entender el tono de El rey pasmado y para alabar el trabajo tanto de dirección como de los magníficos actores que trabajan en esta película. La película no es que sea una obra maestra ni una obra de referencia en el humor, pero esta escena, en la que Juan Diego brilla, merece la pena ser vista. En esta escena están reunidos todos los hombres de Dios, moderados por el inquisidor, interpretado por Fernán Gómez, discutiendo si es pecado o no que el rey vea a la reina desnuda. Me parece una escena en la que el trabajo de guión que hay detrás de esta película, que también es destacable, sale a la luz por boca de unos personajes divertidísimos, una escena casi paródica, cargada de sarcasmo que demuestra a qué altura está esta película.
En general, como ya he dicho, no es El rey pasmado la comedia por excelencia del cine español, pero creo que cualquier amante de este género no debería perdérsela porque la sutileza y la ironía que pueblan todas sus escenas y que hacen de esta película, además de un maravilloso entretenimiento, una crítica a la sociedad más rancia y retrógrada que todavía hoy en día camina por España, son difíciles de encontrar con un aire tan fresco y moderno como el de esta película.
No quería, sin embargo, terminar mi comentario sin hacer una mención especial a la dirección artística de esta película. No es éste un aspecto en el que yo suela centrar mi atención. Lo mío es el guión. Pero sí me considero amante de la pintura, que no entendida, y amante de Velázquez también, y por eso he podido darme cuenta de la cantidad de referencias al gran pintor español que pueblan esta película y que la hacen tan barroca como deliciosa. La dirección artística consiguió el Goya en su año, y no es de extrañar, pues logran crear un marco sublime para una historia tan ingeniosa como es El rey pasmado. Un copón de película para ella.
5 jun 2010
Lugares Comunes
El cine argentino, generalmente, es un cine que no decepciona. No sé qué tienen esos habitantes de América del Sur, qué sensibilidad especial o qué manera de engatusar con su lengua al contar historias, porque las películas les suelen quedar muy bien.
No he visto muchas películas argentinas, y por eso me decidí a ver ésta, para ir ampliando repertorio. Había oído hablar bastante de ella, y sé que era una película que generaba controversia: muchos la amaban, pero para otros muchos, pasaba desapercibida. Por fortuna o por desgracia, yo estoy en el segundo grupo.
Me acerqué a ella de la manera que más me gusta a mí, sin saber nada sobre su argumento. Sin prejuicios de ningún tipo y con ganas de ser sorprendida. Pero la película empezó mal, yo no tuve la culpa. Vi en los créditos que era la adaptación de una novela. Ok, sin problema. Pero entonces empezó la voz en off, y la voz en off narraba, y la voz en off me cansaba. Si algo odio realmente es las adaptaciones de novelas que cantan de lo lindo en una pantalla. La novela tiene su propio lenguaje, y el cine, otro totalmente diferente y no tolero que ambos se mezclen. No me gusta que me cuenten una película por escrito, puesto que una película no son palabras, sino imágenes, y no me gusta que me enseñen fotogramas de paisajes mientras me narran una película.
Por otro lado, la premisa de esta película tampoco me atraía: un hombre que se dedica a la enseñanza al que jubilan anticipadamente por motivos de censura, por cosas relacionadas con la política. Por desgracia para mí, no estoy muy familiarizada con la historia de Argentina, y eso también me ha hecho apartarme un poco más de la película.
Pero no todo podía ser malo, porque ahí estaba Luppi. Federico Luppi, uno de los mejores actores argentinos y uno de mis preferidos de ese país. Y como siempre, su trabajo es magnífico, totalmente natural, es difícil separar al personaje de la persona en la mayoría de sus películas, y en esta así ocurre. A su lado, Mercedes Sampietro, que encima recibió un premio a su interpretación, pero que yo no la veo tan espectacular, y mucho menos si la pones al lado de Luppi, que todo lo eclipsa.
La línea argumental de esta película es tan clara como difusa. He tenido la sensación de que en todo momento sabía lo que me estaban contando, pero no entendía a qué venían esas cosas. Es como si se fueran sucediendo capítulos (como en una novela) que apuntan a una misma dirección pero que parece que no llegan a ningún sitio. Finalmente esta película se resume como un trozo de vida de un hombre en el que tampoco vemos que sucedan unos acontecimientos fuera de lo común. Se hace raro ver una película tan cotidiana, tan cercana, tan naturalista, en la que apenas ocurre nada, aunque eso no es criticable, simplemente ese no es el tipo de cine que más me atrae a mí.
Se me ha hecho bastante aburrida, básicamente porque nada de lo que me contaban me interesaba. No obstante destacaré algunos parlamentos tan sublimes como todos los que este cine nos tiene acostumbrados. Pero vuelvo a lo mismo: es literatura. Yo vine aquí a ver una película.
Me ha dado un poco de pena que una película argentina me defraude, porque todas las que había visto me habían parecido peliculones, pero bueno, todos tenemos nuestros más y nuestros menos, así que no voy a cesar en el empeño de seguir rebuscando entre las grandes películas de ese país para seguir encontrando joyitas como las que ya conozco. Lugares Comunes se queda con un ojete de monico.
No he visto muchas películas argentinas, y por eso me decidí a ver ésta, para ir ampliando repertorio. Había oído hablar bastante de ella, y sé que era una película que generaba controversia: muchos la amaban, pero para otros muchos, pasaba desapercibida. Por fortuna o por desgracia, yo estoy en el segundo grupo.
Me acerqué a ella de la manera que más me gusta a mí, sin saber nada sobre su argumento. Sin prejuicios de ningún tipo y con ganas de ser sorprendida. Pero la película empezó mal, yo no tuve la culpa. Vi en los créditos que era la adaptación de una novela. Ok, sin problema. Pero entonces empezó la voz en off, y la voz en off narraba, y la voz en off me cansaba. Si algo odio realmente es las adaptaciones de novelas que cantan de lo lindo en una pantalla. La novela tiene su propio lenguaje, y el cine, otro totalmente diferente y no tolero que ambos se mezclen. No me gusta que me cuenten una película por escrito, puesto que una película no son palabras, sino imágenes, y no me gusta que me enseñen fotogramas de paisajes mientras me narran una película.
Por otro lado, la premisa de esta película tampoco me atraía: un hombre que se dedica a la enseñanza al que jubilan anticipadamente por motivos de censura, por cosas relacionadas con la política. Por desgracia para mí, no estoy muy familiarizada con la historia de Argentina, y eso también me ha hecho apartarme un poco más de la película.
Pero no todo podía ser malo, porque ahí estaba Luppi. Federico Luppi, uno de los mejores actores argentinos y uno de mis preferidos de ese país. Y como siempre, su trabajo es magnífico, totalmente natural, es difícil separar al personaje de la persona en la mayoría de sus películas, y en esta así ocurre. A su lado, Mercedes Sampietro, que encima recibió un premio a su interpretación, pero que yo no la veo tan espectacular, y mucho menos si la pones al lado de Luppi, que todo lo eclipsa.
La línea argumental de esta película es tan clara como difusa. He tenido la sensación de que en todo momento sabía lo que me estaban contando, pero no entendía a qué venían esas cosas. Es como si se fueran sucediendo capítulos (como en una novela) que apuntan a una misma dirección pero que parece que no llegan a ningún sitio. Finalmente esta película se resume como un trozo de vida de un hombre en el que tampoco vemos que sucedan unos acontecimientos fuera de lo común. Se hace raro ver una película tan cotidiana, tan cercana, tan naturalista, en la que apenas ocurre nada, aunque eso no es criticable, simplemente ese no es el tipo de cine que más me atrae a mí.
Se me ha hecho bastante aburrida, básicamente porque nada de lo que me contaban me interesaba. No obstante destacaré algunos parlamentos tan sublimes como todos los que este cine nos tiene acostumbrados. Pero vuelvo a lo mismo: es literatura. Yo vine aquí a ver una película.
Me ha dado un poco de pena que una película argentina me defraude, porque todas las que había visto me habían parecido peliculones, pero bueno, todos tenemos nuestros más y nuestros menos, así que no voy a cesar en el empeño de seguir rebuscando entre las grandes películas de ese país para seguir encontrando joyitas como las que ya conozco. Lugares Comunes se queda con un ojete de monico.
2 jun 2010
Habitación en Roma
A Médem siempre lo había considerado yo un gran director. Con sus primeras películas ya se podía ver que este director era diferente, especial, atrevido, pero es con Los Amantes del Círculo Polar cuando me conquista por completo. Pero claro, al parecer, una no se debe dejar conquistar tan fácilmente, porque luego se lleva unos disgustos que pa qué. Sí, queridos míos, si Caótica Ana ya daba un poco de cosica, Habitación en Roma es la gran mierda.
Nunca el sexo había sido tan aburrido, subtitularía yo esta película. Y yo que pensaba que me iba a resultar hasta incómoda, con tanta teta suelta, y yendo al cine con un hombre (que por cierto, es mi vecino, me enteré gracias al mundo de los blogs) y... ¡menos mal que fui acompañada! porque si voy yo sola seguro que me quedo dormider.
¡Qué santo coñazo! ¡Menuda historia de mis cojones! ¡Vaya mierda, Médem, coño ya! Yo no sé qué le pasaría a este hombre hace poquitos años, a lo mejor lo de la muerte de su hermana lo dejó catacroker, pero vamos, yo, al menos, puedo marcar un antes y un después en la trayectoria de este autor, y el después está siendo cada vez peor.
Lo que menos me ha gustado pero más me ha sorprendido es que esta película... me suena. A ver si me explico. Bueno, para empezar, hasta el propio director reconoce haberse inspirado en la película En la Cama, aunque yo no la he visto, así que no me puede sonar a esa. Lo que me suena, y nunca mejor dicho, es la música. La misma puta canción repetida hasta la saciedad, como en Vicky Cristina Barcelona. No obstante, viendo el conjunto de la película, la banda sonora de Habitación en Roma, ni tan mal. Un poco cansina de más en algunos momentos, pero vamos, que a veces se agradece salirse de la historia un poco. Luego, aquí el señor Médem debió ir a ver Ágora, de Amenábar, y salió flipando del cine con esos planos de la tierra y dijo: "Yo más", y sí, el nos metió más planos de la Tierra así en plan satélite, que todo se ve muy bonico, pero que vamos... a mí me ha resultado cutre y todo. Y como le gustó mucho Ágora también, pues dijo, yo también quiero rememorar la figura de una mujer antigua interesante, y como Hipatia quedaría feo, que es copiar, pues él eligió a una tal Aspasia de Mileto, que yo no sé quién es, pero al parecer Médem tampoco, porque para meterla en la película tuvo que inventarse una especie de bicicleta con techo y ponerle el nombre de esa mujer. Pa cagarse. Como en Caótica Ana.
Y no quería hacer yo un comentario muy profundo, pero no puedo pasar sin hablaros del guión, que da dolor de corazón. Es verdad que la película la vimos doblada, y oye, a lo mejor las frases en inglés eran bonitas, pero en castellano han quedado algunos diálogos de levantarse en medio del cine y gritar "¡ole!" a la pantalla. Aunque no son los diálogos los culpables de que el guión sea basura, yo creo que la película falla ya desde la primera idea, antes de ser escrita. Gracias a ese guión la película resulta totalmente antinatural, barroca (que está mal que yo lo diga, porque a mí siempre me dicen que soy muy barroca escribiendo), absurda y boba. ¡Con lo bonito que es el amor y qué asco da en esta película!
Así que nada, una puta mierda. Aquí se acaba oficialmente mi relación con Médem, que menudos dos disgustos me ha dado, y además seguidos. Ya he perdido toda mi confianza en él. A su película le voy a dar un ojete de dromedario, que vergüenza me daría a mí, Julito, pero mira, es lo que hay. Y... si queréis escuchar una buena historia sobre el amor que solo dura una noche, yo os recomiendo mejor esto:
Joaquin Sabina – Y Si Amanece Por Fin
Nunca el sexo había sido tan aburrido, subtitularía yo esta película. Y yo que pensaba que me iba a resultar hasta incómoda, con tanta teta suelta, y yendo al cine con un hombre (que por cierto, es mi vecino, me enteré gracias al mundo de los blogs) y... ¡menos mal que fui acompañada! porque si voy yo sola seguro que me quedo dormider.
¡Qué santo coñazo! ¡Menuda historia de mis cojones! ¡Vaya mierda, Médem, coño ya! Yo no sé qué le pasaría a este hombre hace poquitos años, a lo mejor lo de la muerte de su hermana lo dejó catacroker, pero vamos, yo, al menos, puedo marcar un antes y un después en la trayectoria de este autor, y el después está siendo cada vez peor.
Lo que menos me ha gustado pero más me ha sorprendido es que esta película... me suena. A ver si me explico. Bueno, para empezar, hasta el propio director reconoce haberse inspirado en la película En la Cama, aunque yo no la he visto, así que no me puede sonar a esa. Lo que me suena, y nunca mejor dicho, es la música. La misma puta canción repetida hasta la saciedad, como en Vicky Cristina Barcelona. No obstante, viendo el conjunto de la película, la banda sonora de Habitación en Roma, ni tan mal. Un poco cansina de más en algunos momentos, pero vamos, que a veces se agradece salirse de la historia un poco. Luego, aquí el señor Médem debió ir a ver Ágora, de Amenábar, y salió flipando del cine con esos planos de la tierra y dijo: "Yo más", y sí, el nos metió más planos de la Tierra así en plan satélite, que todo se ve muy bonico, pero que vamos... a mí me ha resultado cutre y todo. Y como le gustó mucho Ágora también, pues dijo, yo también quiero rememorar la figura de una mujer antigua interesante, y como Hipatia quedaría feo, que es copiar, pues él eligió a una tal Aspasia de Mileto, que yo no sé quién es, pero al parecer Médem tampoco, porque para meterla en la película tuvo que inventarse una especie de bicicleta con techo y ponerle el nombre de esa mujer. Pa cagarse. Como en Caótica Ana.
Y no quería hacer yo un comentario muy profundo, pero no puedo pasar sin hablaros del guión, que da dolor de corazón. Es verdad que la película la vimos doblada, y oye, a lo mejor las frases en inglés eran bonitas, pero en castellano han quedado algunos diálogos de levantarse en medio del cine y gritar "¡ole!" a la pantalla. Aunque no son los diálogos los culpables de que el guión sea basura, yo creo que la película falla ya desde la primera idea, antes de ser escrita. Gracias a ese guión la película resulta totalmente antinatural, barroca (que está mal que yo lo diga, porque a mí siempre me dicen que soy muy barroca escribiendo), absurda y boba. ¡Con lo bonito que es el amor y qué asco da en esta película!
Así que nada, una puta mierda. Aquí se acaba oficialmente mi relación con Médem, que menudos dos disgustos me ha dado, y además seguidos. Ya he perdido toda mi confianza en él. A su película le voy a dar un ojete de dromedario, que vergüenza me daría a mí, Julito, pero mira, es lo que hay. Y... si queréis escuchar una buena historia sobre el amor que solo dura una noche, yo os recomiendo mejor esto:
Joaquin Sabina – Y Si Amanece Por Fin